Viña Santa Ema es una emblemática bodega chilena fundada en 1956 por Pedro Pavone Voglino, inmigrante italiano que se enamoró del potencial vitivinícola del Valle del Maipo. Desde entonces, la bodega ha sido sinónimo de tradición familiar, calidad y una visión a largo plazo orientada a producir vinos de alta gama que reflejan el carácter del terroir chileno.
La línea Gran Reserva de Santa Ema representa un nivel superior de calidad dentro de su portafolio. Son vinos elaborados a partir de viñedos seleccionados, con rendimientos controlados y una vinificación cuidadosa que incluye crianza en barricas de roble, lo que les otorga estructura, complejidad y potencial de guarda.
El Carmenère, cepa emblema de Chile, encuentra en el Valle del Cachapoal condiciones ideales: clima cálido con influencia andina, buena exposición solar y suelos franco-arcillosos que favorecen la maduración lenta y completa de esta variedad tardía.
NOTAS DE CATA
Color rojo violáceo profundo, con matices púrpura. Limpio, brillante y de buena densidad.
Aromas muy expresivos, con predominio de frutas negras como mora y ciruela, acompañadas de notas características de la variedad: pimiento rojo asado, pimienta negra, especias dulces (canela, clavo) y toques de chocolate y café tostado derivados de su paso por madera.
Entrada amable, con cuerpo medio-alto y taninos redondos. Muy buena estructura y equilibrio entre fruta y madera. La acidez es fresca y el final es largo, persistente, con recuerdos especiados y un toque mineral.
MARIDAJE
El Carmenère es un vino muy versátil y armónico con una amplia gama de platos, especialmente aquellos con elementos especiados, carnes suaves y cocina chilena tradicional.
Sugerencias de maridaje:
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Carnes blancas (cerdo, pollo al horno, pavo)
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Pastas con salsas especiadas o ahumadas
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Platos chilenos como charquicán, pastel de choclo, empanadas de pino
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Guisos especiados, estofados de vegetales o lentejas
