El Raíz Profunda es un vino tinto español que destaca por su profundidad, carácter y una marcada expresión del terroir. Elaborado principalmente a partir de uvas Tempranillo, esta añada de 2014 refleja una cuidada selección de viñedos antiguos, probablemente situados en una de las regiones más destacadas para esta variedad, como Ribera del Duero o Rioja. Este vino es un verdadero testamento de cómo una vinificación meticulosa puede resaltar el potencial de una añada y el tiempo en botella.
El Raíz Profunda es un vino que refleja tanto la riqueza de la Tempranillo como la influencia de un terruño singular. Es una expresión madura y elegante, con una excelente capacidad de guarda, por lo que puede seguir evolucionando en botella durante varios años más. Ideal para amantes de los vinos con estructura y complejidad, es un tinto que no solo se disfruta en la mesa, sino que invita a la meditación y la apreciación lenta de cada sorbo. Un vino perfecto para ocasiones especiales o para acompañar una comida robusta y bien elaborada.
NOTA DE CATA
El Raíz Profunda tiene un color rojo granate intenso, con destellos rubíes que denotan evolución, pero todavía con un vibrante núcleo que sugiere longevidad. Su capa es alta, y al mover la copa, se percibe una lágrima densa que anticipa una buena concentración de cuerpo y estructura.
En nariz, este vino es complejo y envolvente. Al principio se perciben aromas de fruta negra madura, como moras y ciruelas pasas, entrelazadas con notas de higos y frutas en compota. A medida que se abre, se despliegan matices más terciarios: notas de cuero, tabaco, cacao y especias dulces, como la vainilla y el clavo, gracias a su crianza en barrica de roble. Además, hay un fondo mineral que evoca el terruño del que proviene, añadiendo capas de profundidad y complejidad.
MARIDAJE
Este vino es ideal para acompañar platos contundentes y con carácter. Se recomienda maridarlo con carnes rojas asadas, guisos de cordero, estofados o platos de caza. También va muy bien con quesos curados y embutidos ibéricos, así como con platos de setas o trufas, que complementan su profundidad y complejidad.