Bodegas Bohórquez apuesta por la viticultura de montaña –su viñedo se encuentra a 920 metros de altitud- y por elaborar vinos elegantes y complejos reflejo del “terroir”. Cardela Crianza 2017 se nutre de las viñas que la bodega posee en el páramo de Pesquera de Duero, con una edad de 25 años. En su ensamblaje participan la tempranillo (88%), la cabernet sauvignon (8%) y la merlot (4%). Las uvas se vendimiaron a mano en pequeñas cajas y después los racimos pasaron por mesa de selección. Una vez elaborado, Cardela envejeció 12 meses en barricas (80% roble francés 20% roble americano).
Hace dos décadas que Javier Bohórquez aterrizó en Ribera del Duero procedente del Marco de Jerez con el objetivo de elaborar vinos de la máxima calidad en los que la elegancia primara sobre la potencia. Para ello se hizo con 21 hectáreas de viñedo en Pesquera del Duero (Valladolid). Así Bodegas Bohórquez. La gran mayoría de sus viñas se ubican en el mítico pago de Valderramiro, a más de 900 m de altitud sobre suelos pobres, donde las uvas se benefician de una lenta maduración y se transforman en vinos de gran carácter y elegante frescura, avalados con premios internacionales y altas puntuaciones.
PUNTUACIONES
Puntuado con 90 por Guía Peñín de los vinos de España
NOTA DE CATA
De color rojo picota intenso, de buena capa.
Con una nariz fina e intensa, en la que se aprecian aromas de fruta roja en confitura junto a notas lácticas y de pastelería, dando paso a recuerdos de juanola, coco y minerales.
En boca resulta sabroso, equilibrado, con amplitud y noble expresión tánica. Fresco en su paso, goloso y con un final de buena longitud.
MARIDAJE
Cardela Crianza 2017 (D.O. Ribera del Duero) es ideal para acompañar carnes asadas, arroz con pollo y legumbres.